13/2/09

¿LE PASA ALGO MALO AL PP?


Si yo no escuchara la radio ni leyera los periódicos y sólo mirara los informativos de Canal 9 la televisión valenciana, sobre la trama de corrupción del PP hubiese obtenido las siguientes conclusiones:
-Trama, ¿qué trama?
-El juez Baltasar Garzón es un tipo que odia al PP y que lejos de tener una carrera ejemplar, siempre ha buscado el máximo protagonismo en la mayoría de sus casos.
-Que Federico Trillo y Soraya Sáez de Santamaría han acudido a la Audiencia Nacional para recusar al juez Baltasar Garzón por ser anti-PP.
-Aquí lo realmente importante es que el Ebro este año viene muy crecido y toda el agua que está vertiendo al mar se podría aprovechar con un trasvase para regar la huerta de Valencia.
Ni que la policía la semana pasada entró en la Consejería de Turismo y se incautó de documentación; ni que hay una serie de altos cargos del PP en la cárcel o han sido interragados por un juez; ni que hay empresas que contrataban para el PP y que posiblemente fueran una tapadera para financiarlo; ni que Rajoy y Espe están mátame que te mataré y se acabarán muriendo; ni nada de nada. A esto se le llama información independiente. Con dos cojones.

8/2/09

MAMÁ, TENGO HAMBRE

«-¿Cuál es tu mayor deseo? –pregunto a una muchacha.
-Sueño con comprarme unos zapatos italianos, de tacón de aguja, de esos que valen mil cuatrocientos zlotys, y con tener una gran habitación donde cupiera una alfombra enorme mullida.
-¿Y no sueñas con comer?
-¿Comer? ¿A qué viene una pregunta tan tonta?
Sin embargo, no es una pregunta tonta. Una pregunta así puede hacer explotar el mundo. Cuando mucha gente se la hace al mismo tiempo, estalla una revolución. Pero ¿cómo explicárselo a esta chica? A muchachas como ésta, más vale evitarles las explicaciones, no vaya a ser que después les duela la cabeza.»
Este texto lo escribió Ryszard Kapuscinski en 1962 y pertenece a su primer libro “La jungla polaca”, editado recientemente en España. Han pasado 46 años y ahora, en los tiempos en que vivimos, está más de actualidad que quizá en aquella época.
La puta crisis que sufrimos nos tiene cogidos por los huevos y a mucha gente se los está apretando tanto que el dolor se les está volviendo insoportable. Si los gobiernos y todos los llamados agentes sociales en general no hacen algo positivo pronto, mucha, muchísima gente, empezará a preguntarse qué hacer para saciar su hambre y entonces puede que se monte una bien gorda. No es ninguna tontería preguntar ¿qué hay hoy para comer?