24/3/13

Los avestruces del PP



¿Dónde está de Cospedal? Desde el día de la cantinflada del despido de Bárcenas, que no se la ve por las radios y televisiones, donde tanto le gusta aparecer. Sólo un día se reunió la cúpula del PP para respaldarla y darle ánimos, que no se hundiera la pobrecita, que una mala tarde la tiene cualquiera. Por no salir, no ha ido ni a Roma a ver al nuevo Papa, y quizá en Semana Santa se quede en casa sin salir a las procesiones vestida de negro con la mantilla y peineta que tanto le gusta lucir, para demostrar a las descreídas mujeres actuales cuál debería ser su sitio en la sociedad.
¿Y Esperanza Aguirre, qué es de ella? También, gracias a Bárcenas (algunos dirigentes del PP están pensando en levantarle una estatua esquiestre), que está desaparecida en combate. Su táctica es clara: está escondida como una tigresa en un cañaveral esperando a que el cervatillo de Rajoy se acerque a beber al riachuelo Bárcenas para saltar sobre él y morderle en el cuello hasta matarlo. Pero no está ella sola, sobre las ramas de los árboles que crecen a las orillas del riachuelo hay posados un montón de buitres a la espera de los despojos que deje la tigresa.
¿Y Rajoy, también existe? Salía más en los medios de comunicación cuando era líder de la oposición que ahora que es presidente del gobierno. Lo único que demuestra su actitud es que es un cobarde, que antepone los intereses de los bancos alemanes a los de sus conciudadanos. Llegó al gobierno con mentiras y tiene tan poca vergüenza que es incapaz de ponerse ante ellos para pedirles siquiera perdón. Si estuviéramos en un país como Gran Bretaña, con una democracia de calidad, ahora estaría en la prisión por mentir como un bellaco, como le ha ocurrido a un ministro inglés. Pero Spain is diferent.