30/1/09

EL ENTIERRO DE OVANDO GUERRA

Querido Corpi:
Esta noche, paseando por el cementerio, he pasado por delante del nicho de Ovando Guerra y me he acordado de su entierro, un hecho ocurrido hace muchísimo tiempo y que fue muy comentado entre el vecindario. Te cuento:
Desde el mismo momento de su nacimiento, se le auguró al bueno de Ovando una existencia problemática. Durante el embarazo de su madre se pensaba que ésta llevaba trillizos por la enormidad de la barriga que lucía la señora, pero en el momento del parto se comprobó que estaban equivocados. Cuando la matrona tiró de la cabeza del neonato empezó a salir niño, tanto que no se acababa nunca: 99 cm. midió al nacer. Te podrás imaginar el alivio de sus padres por una parte, pues sólo era uno, y la sorpresa por otra, pues casi estaba preparado para ir a la escuela. Como comprenderás, esto le acarrearía muchos problemas a lo largo y alto de su vida, pero con tesón y buen ánimo los fue superando, hasta se casó y todo con una buena mujer que lo quiso mucho, pero que no consiguió darle ningún hijo; las malas lenguas dicen que tenía miedo a que le saliera una jirafa y hacía lo imposible por quedarse embarazada.
Ovando Guerra, desde su altura de bastante más de dos metros, veía el mundo desde otra perspectiva y aguantaba las bromas y risas de los demás con los que se reía a su costa sin darle mucha importancia, ¿qué podía hacer? Hasta que por fin, dios nuestro señor lo llamó a su lado y su alma voló hacia el cielo recorriendo menos distancia que la nuestra, por razones obvias.
Sus cuñados, respetando el dolor de su hermana viuda, se encargaron de comprar el ataúd, pero cuando metieron el cuerpo dentro de la caja, se dieron cuenta de que éste no cabía, y eso que habían comprado el más largo. Entonces decidieron, con gran dolor de todos, serrar la parte de los pies de la caja; así fue como metieron dentro el cadáver del difunto, con los pies por delante que le sobresalían fuera del ataúd.
Después del funeral lo trajeron al cementerio para darle sepultura en un flamante nicho nuevo que había adquirido la familia para la ocasión. Pero cuando metieron el féretro dentro del agujero, los pies sobresalían del receptáculo y no lo podían encerrar. Entonces se organizó un debate sobre qué hacer para meter el largo cuerpo del difunto en el estrecho agujero. Después de sopesar todas las posibilidades, decidieron abrir la tapa y flexionarle las rodillas. Y así lo hicieron tras un largo esfuerzo, pues las piernas ya estaban rígidas por el rigor mortis; pero resultó que no podían cerrar la tapa; entonces decidieron meterlo sin tapa, pero por algún extraño fenómeno, cuando lo metieron en el nicho, las rodillas se flexionaron aún más y tropezaban con el techo y no lo podían meter. Entonces un cuñado dijo: “¿por qué no le cortamos los pies? Total ya no los va a utilizar más.” Esto lo dijo porque se había quedado prendado de los lustrosos zapatos del difunto y quería agenciárselos para vestirse los domingos. Aquello provocó un enconado debate que se resolvió con la decisión de romperle el cuello y así flexionarle la cabeza contra la parte posterior de la caja y ver si conseguían ganar los suficientes centímetros para meterlo dentro. Y así lo hicieron. El encargado fue otro cuñado, uno que le tenía envidia porque durante la vida le había ido mejor que a él. Éste le cogió la cabeza, y con descarado deleite, se la dobló con fuerza hasta que se oyó un crujido que resonó entre las tapias del camposanto. La pobre viuda rompió a llorar cuando oyó aquel terrible chasquido. De nuevo metieron al difunto dentro del ataúd y a éste en el nicho, pero los pies del gigante continuaban sobresaliendo del hueco. Otra vez se encendió el debate sobre qué hacer para enterrar al difunto. El enterrador apremiaba a la familia para que tomara una decisión rápidamente porque estaba oscureciendo y no había ninguna luz en el cementerio. Unos, instigados por un cuñado, abogaban por cortarle la cabeza, porque total, ya le habían roto el cuello. Otros, sin embargo, instigados por el otro cuñado, respaldaban la idea de cortarle los pies, porque era más humano que cortarle la cabeza. Como no se ponían de acuerdo y las tinieblas se iban aposentando entre las paredes del cementerio, decidieron coger unos de la cabeza del cadáver y los otros de los pies, y tirar para ver qué parte se desprendía más pronto. Y así lo hicieron: unos agarrados bien fuerte de la cabeza y los otros de los pies; y cuando la viuda contó hasta tres, empezaron todos a tirar con todas sus fuerzas. Los que tiraban de los pies se quejaron porque el enterrador, al que nadie había llamado en ese entierro, se unió a los que tiraban de la cabeza, mientras estos se quejaban de que la viuda se hubiera unido al grupo de los que tiraban de los pies. Al cabo de un buen rato, con los cuerpos jadeantes y empapados en sudor y con la noche instalada en el cementerio, abandonaron el cadáver en el suelo y se fueron discutiendo sobre la idoneidad de haberle arrancado la cabeza o los pies. Al día siguiente, cuando regresaron para enterrarle, le faltaban, al aterido cuerpo, los lustrosos zapatos.

25/1/09

LA LLAMADA DE OBAMA


Conocí a Obama en el año 84 durante una gira que hicimos por los Estados Unidos jugando a baloncesto. Finalizamos la gira en Hawai y nos quedábamos a dormir en casa de nuestros contrincantes. Yo me quedé durante dos días en su casa, de ahí surgió nuestra amistad. Desde entonces nos escribimos regularmente, y un par de veces al año hablamos por teléfono, nos hemos visto dos veces aunque ya hace mucho tiempo que no lo veo personalmente. La última vez que conseguí hablar con él fue dos días después de que le ganara a Clinton la candidatura para presentarse a presidente. Después he intentado ponerme en contacto con él para felicitarle por su presidencia sin conseguirlo, hasta que por fin me llamó anoche, a las cuatro de la madrugada, para hablar cinco minutos.
Me dijo que está asustado. Todo el mundo ha descargado sobre sus espaldas la responsabilidad de arreglar esta crisis, como si fuera un nuevo mesías venido del cielo con una fórmula bajo el brazo capaz de solucionar los problemas que se reproducen por doquier. Yo le pregunté si no estaba contento de ser el nuevo presidente y me contestó que tenía unos sentimientos contradictorios: por un lado sentía alegría, pero por el otro el peso de la responsabilidad aplastaba esa alegría y se convertía en algo parecido al pánico que lo atenazaba a la hora de tomar decisiones. Y todo por culpa del mundo, porque éste no se da cuenta de que él es presidente de los EEUU, y no del mundo; él se debe a sus compatriotas que son los que lo han votado y los que con sus impuestos levantan ese estado. El mundo no es más que un medio para que se cumpla el sueño americano y no un fin al que está abocado su país. Él única y exclusivamente va a defender los intereses de su país; si con ello se mejora el mundo, mejor, si no, lo siento. Los europeos, a los que les gusta tanto cogérsela con papel de fumar y que son tan buenos y solidarios, le gustaría que fueran más decididos y que no descargaran en los EEUU todo el peso de la acción. Entonces yo le dije que su país es el más poderoso del mundo. Él lo aceptó, pero dijo: yo no puedo, por ejemplo, arreglar el problema del terrorismo en España, y como tu país hay decenas; eso lo debéis arreglar vosotros solos. Bush se ha ido de rositas dejándome el país casi en la bancarrota, metido en dos guerras y con una deuda exterior que veremos cómo se paga. Bastante voy a tener con solucionar mis problemas, como para solucionar los problemas de los demás. ¿Por qué te metiste en esto? le pregunté.¿ Recuerdas el relato de Jack London: la llamada de lo salvaje, cuando el perro miraba hacia el bosque y sabía que allí estaban sus orígenes y que debía volver al que era su lugar? Pues lo mismo me pasaba a mí, el hombre es un animal político, y yo notaba que algo me llamaba a seguir este camino, y aquí estoy. Ahora todos los líderes del mundo están esperando tu llamada para que los invites a tomar café en la Casa Blanca, le dije. Sí, contestó, voy a tener que comprar una cafetera profesional. Y con el conflicto palestino, ¿qué vas a hacer? Ya me he comprado dos tubos de Hemoal, para las almorranas. Después nos preguntamos por las respectivas familias y nos despedimos hasta pronto. Antes de colgar le grité por el teléfono que no se olvidara de África, pero no sé si llegó a escucharme.

18/1/09

LA GUERRA EN PALESTINA

Dicen que dos no se pelean si uno no quiere, pero parece ser que en Israel y Palestina quieren bronca los dos, y hay que ver la que se están dando, sobre todo los israelitas a los palestinos, a los que aplastan como si fueran hormigas. Pero estos no se amilanan y contraatacan con todo lo que tienen, que es muy poco contra la maquinaria demoledora de los adversarios.
Los palestinos de Hamás son unos hijos de puta, fundamentalistas radicales a los que les importa un pimiento morrón su pueblo, pues éste no es más que un medio para alcanzar su fin: la reafirmación de un estado palestino independiente, gobernado por ellos con el apoyo y la sabiduría de Alá. Por eso fomentan una política de crecimiento demográfico desmesurado en un pueblo masificado y que pasa hambre, para conseguir un ejército de incondicionales, mártires por dios y por la patria si es preciso, con los que hacer frente al todopoderoso Israel. Para ello no les tiembla la mano ni les quita el sueño, ver como mueren sus mujeres y sus hijos si eso les da propaganda y atrae sobre ellos los ojos incrédulos de los occidentales, que con lágrimas en los ojos, se rascan más fácilmente los bolsillos.
Por el otro lado tenemos a los hijoputas de los israelitas, fundamentalistas religiosos, racistas antiárabes, que con su influencia en los EEUU sobre todo, han conseguido sobrevivir en el infierno de Alá gracias al Dios Todopoderoso de los dólares americanos. Sin el apoyo de estos, a buenas horas habría allí judíos, por lo menos, como lo están ahora. Y lo peor de todo es que en apenas sesenta años, se han olvidado de la historia, de la que los ha puesto allí, simplemente por pura conveniencia. Porque si están allí, es por la lástima que se les tuvo tras la Segunda Guerra Mundial, pues les metieron en una tierra, que no voy a negar que también fuera suya, pero no exclusivamente como sí lo es ahora, desplazando y conquistando con el paso del tiempo a base de bombas y balas, y creando un odio atávico que va a ser muy difícil de erradicar en los pueblos de la zona.
Por eso creo que el problema entre palestinos e israelíes no se va a solucionar nunca; demasiado rencor y pocas ganas de reconciliación. La división entre tutsis y hutus en Ruanda, con más de ochocientos mil muertos, poco a poco parece que se va normalizando. Incluso aquí, tras una guerra fratricida, ahora vivimos en una avanzada democracia y el respeto de unos con los otros impera en la vida cotidiana. Pero en Oriente Medio las cosas son diferentes, sus dioses son demasiado poderosos y sólo uno es el verdadero, el dinero.

8/1/09

QUIEN BUSCA, ENCUENTRA

De vez en cuando me gusta escudriñar de dónde viene la gente que pasa por aquí y por qué han venido a hacerme una visita. La gente que habitualmente me visita, ya sé que busca ver si he escrito alguna cosa nueva y leer o comentar algo, pero hay mucha más gente que viene por aquí vía Google o Yahoo, principalmente. Son estos los que me atrae saber por qué han venido aquí, qué estaban buscando, y para esto nada mejor que la herramienta que tengo instalada al final: FEED JET. Allí me marca la nacionalidad de donde viene el visitante y, pinchando en el enlace, qué cojones buscaba. En los últimos tiempos he ido anotando lo más curioso que me ha parecido y esta es una muestra de lo que la gente ha venido a buscar a mi blog:
-Espías de la COPE.
-Es malo que la mujer sangre más de diez días.
-Un osito de peluche mata 2500 truchas.
-Queremos turrón, turrón, turrón, pero que sea Antiu Xixona.
-Corre muchacho, ya no te detengas.
-No quiero estudiar, qué hago.
-No se me quita con nada el frío.
-Con los dedos de una mano voy contando los minutos.
-Follando con el obispo.
-Un hombre atrapa a la muerte en un saco.
-Por qué sale sangre fría de la nariz.
-Cómo acomodar vacunas en la red fría.
-Me lo tomo todo a la tremenda.
-Sexo oral cáncer garganta semen.
-Si estás leyendo esto es porque no tienes nada mejor que hacer con tu vida.
-Enfermería neonatal trasvasación de soluciones.
-Definición de asesino a sangre fría asesino predator.
Supongo que si al escribir estas cosas en el Google les ha mandado aquí, será porque yo tengo escrito algo de todo eso. Dios mío, en qué estaba pensando entonces.