Menuda la que se ha montado con el Becam de los cojones. Que se va del Real Madrid al Galaxi de los Ángeles. Pues que le vaya bonito. Para lo que ha hecho mejor no haber venido. Y que conste que no me disgusta como jugador. Quizá en otro equipo un poco menos puntero como el Valencia, el Deportivo de la Coruña o el Sevilla habría brillado, como jugador, más que en el Real Madrid. Pero por lo visto el Todopoderoso Florentino Pérez de los huevos no lo trajo para que jugara, sino para hacer dinero que es lo único que sabe hacer el ignorante: dinero. Y por lo visto Becam también.
Vamos a ver, el tío se va por dinero. No sé lo que ganaba en España ni lo que ganará allá. Vamos a suponer que la diferencia es de varios millones de euros, supongamos cuatro millones. Una persona que gana pongamos seis millones y pasa a ganar diez, ¿en qué se va a ver beneficiado su nivel de vida? ¿En que su casa de mil metros pasará a ser de diez mil? ¿Y en una casa así se va a vivir mejor? ¿Y el coche, de tener un Mercedes 500 a tener uno 5000? ¿Y qué cojones va a tener ese coche más que el otro y que a ti no te hubiera satisfecho? Yo creo que la diferencia en la forma de vivir va a ser mínima. En cambio si tú ganas 60 € al día y te ofrecen 100 €, ahí sí que la diferencia es abismal y sí que puede suponer un cambio sustancial en tu nivel de vida.
También estoy convencido que gran culpa de que Becam se vaya es de su mujer. La pedorra esta por fin se va a poder codear con gente de su misma alcurnia, y dejará de oler a ajo, con lo sano que es para el corazón, mejor, a más tocamos. No sé si se habrán dado cuenta pero en una pareja cuando una persona tiene un carácter muy fuerte, la otra es normalmente de carácter débil, y por lo general sumisa; de lo contrario si fueran los dos de fuerte carácter acabarían pegándose de hostias. Pues en el caso que nos ocupa la que tiene el carácter fuerte es la Pija de los huevos, y el pobre Becam a tragar, pues que se joda, aunque en el fondo se le ve un buen chico.
P.D. No sé como se escribe Becam en inglés, y es que no he tenido la oportunidad de aprender inglés. En cambio el Becam se ha pasado cinco años en España y apenas sabe decir buenos días en castellano. Pues eso, Becam.
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