¿Hay que predicar con el ejemplo, o haz lo que yo digo pero no lo que yo hago?
Esta reflexión me viene a la cabeza después de observar el comportamiento de la Santa Madre Iglesia Católica Apostólica y Romana.
Se ha muerto Pinochet y allí está el obispo de turno para darle el pasaporte hacia el cielo. ¿Realmente cree la Iglesia que un tipo como éste es digno de ir al cielo? Lo mismo ocurrió cuando el ejército se levantó contra la República democrática en la España de 1936. Allí estaba la Iglesia para bendecir el levantamiento y proclamar la Cruzada contra el comunismo. La Iglesia se puso al lado de los golpistas y una vez finalizada la guerra fue uno de los pilares de la dictadura (por lo visto los represaliados no eran hijos de Dios).
A la Iglesia siempre le ha gustado el poder, es más, es una forma de poder en sí misma. Durante la Edad Media su influencia sobre reyes fue tal que mandaban ellos más que los propios reyes. No hay que olvidar la Inquisición. ¡Cuánta gente murió de forma estúpida en manos de los tribunales eclesiásticos! Incluso el Papa era más poderoso que muchos reyes, hasta el punto de que tenía un ejército propio que hacía guerras en nombre del Papa.
Con la democracia el poder de la Iglesia se ha ido debilitando. Van perdiendo clientes, quiero decir fieles, que se apuntan al nuevo culto, el dinero, incompatible con la fe en Dios, o quizá no, por eso los obispos viven tan bien, casi todos están bien gordos, bien vestidos, y bien enjoyados. ¿No dijo Jesucristo que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de los cielos? Y mira tú por donde casi todos los más ricos de este país son católicos, fíjate en el Opus Dei. ¿Pero la Iglesia no debe predicar con el ejemplo?¿ no debería ser pobre? Por lo menos debería aparentarlo.
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